Se ha convertido en todo un fenómeno gracias a las celebrities en general, que se las hacen durante rodajes, en backstage de desfiles de moda, disfrutando de un café en Starbucks, en conciertos con amigos, en comidas privadas, salas VIP de las mejores discotecas, mientras se hacen la manicura/pedicura/masaje... y luego las suben a las redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram...) para informar a sus fans de qué están haciendo con cada segundo de su vida- NUESTRO PAN DE CADA DÍA.
De hecho, todos nos hemos hecho alguna que otra antes del boom actual...no hace falta ser famoso para ello; todos tenemos una faceta narcisista innata que brota en algún instante de nuestra vida...
Hablamos de las selfies, autofotos que suelen tomarse principalmente desde smartphones particulares (cuando no existían los smartphones solían hacerse con cámaras digitales) con la cámara frontal o posterior del teléfono móvil, mientras su propietario posa solo, o a veces con acompañante, poniendo alguna cara graciosa, ridícula, poniendo morritos...
Y es que sacarse una foto a uno mismo ha adquirido tal popularidad que desde el 19 de noviembre consta en el diccionario Oxford, como palabra del año.
Pero no se trata de una moda surgida a partir de los smartphones ni las redes sociales aunque así lo creamos... sino que se considera que la primera selfie fue tomada a mediados del s.XIX, en 1839 concretamente, por Robert Cornelius (Filadelfia), entusiasta de la fotografía.
CARLA
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